Después de dos años sin poder celebrar la Semana Santa con sus tradiciones, toda España se prepara para recuperar del 10 al 17 de abril sus festejos durante los próximos días. Mucha gente prefiere escapar de las procesiones, pero si eres un adepto de estas tradiciones, hay auténticas joyas que te vamos a descubrir.
Durante estas fechas, cada localidad española ofrece su particular encanto de costumbres y tradiciones culturales. Si hay algo que enriquece a este país, son las diferencias que podemos encontrar incluso entre provincias vecinas.
Puede ser que las procesiones más conocidas de estos días sean las de Sevilla. Sin embargo, el resto de España tiene festejos propios tan importantes que algunos son considerados Fiesta de Interés Turístico Internacional.
Te damos tres motivos para disfrutar de la Semana Santa más allá de la sevillana:
Semana Santa de Mérida
La Semana Santa de Mérida fue declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional en 2018, además la ciudad es Patrimonio de la Humanidad. La madrugada del Viernes Santo realizan la Solemne procesión y Vía Crucis de Mérida, una celebración con la imagen del Santísimo Cristo de la O que se realiza dentro del inigualable Anfiteatro Romano.
Además, las Hermandades y Cofradías que procesan estos días lo hacen por distintos monumentos ubicados en el centro histórico de la ciudad como el Arco de Trajano, el Puente Romano, la Alcazaba árabe o el Templo de Diana, un entorno en un enclave único distinto al que vemos en celebraciones similares.
Procesión de los Legionarios de Málaga
Dentro de la Semana Santa andaluza, destaca esta procesión malagueña. Se celebra el Jueves Santo por la mañana con el traslado del Cristo de la Buena Muerte, realizado por los propios legionarios; seguro que has visto imágenes de los militares cantando la canción ‘El novio de la Muerte’ mientras lo portan.
Si decides acercarte a ver esta procesión, debes saber que la gente acude por lo menos tres horas antes para poder disfrutar de esta procesión única. Además, el Cristo de la Buena Muerte permanece todo el año en su capilla con la cabeza descubierta, pero durante la Semana Santa lleva una corona de espinas.
La “rompida de la hora” en Calanda
Una de las mayores diferencias de la Semana Santa aragonesa es su sonido gracias a los bombos y tambores. En Calanda, el Viernes Santo a las 12.00 del mediodía miles de tambores y bombos se congregan en su Plaza del Pilar y empiezan a tocar de forma abrupta.
Es la ‘Procesión del pregón’: los redobles de tambores y bombos cesan cuando el pregonero proclama la muerte de Cristo, sobre las 15.30 de la tarde.
Al día siguiente, Sábado Santo, tiene lugar a las 09:00 de la mañana la ‘Procesión del Entierro’. Es la más solemne de todas de todas las procesiones de su Semana Santa y el toque dura hasta las dos del mediodía.
Si no puedes disfrutar de ninguna de estas diferentes celebraciones, siempre puedes tener el olor de la Semana Santa en tu casa con estos inciensos de distintas cofradías zaragozanas.