Esencia parisina, artesanía y savoir faire made in Spain. Esa es la clave del éxito de Paris/64, la firma zaragozana de bolsos que triunfa a lo largo y ancho del mundo con bolsos versátiles y atemporales que en apenas unos años de vida ha conseguido que modelos como el Prismatic sean objeto de deseo para miles de mujeres.
Los creadores de esta firma española son María Alfonso y José María Pozas, dos zaragozanos que nos han abierto las puertas de su casa para conocer un poco más de su vida, más allá de su firma.
Esta joven pareja, padres de dos hijos, y con otro en camino, viven en un céntrico e histórico edificio del Paseo de la Independencia de Zaragoza. Al llegar a su casa, el sol de primavera entra por los grandes ventanales de una casa que se mueve entre el clasicismo y la funcionalidad.
EL SALÓN, MARCADO POR EL PASADO ARQUITE
En el salón, enmarcado por dos grandes columnas, los techos altos, las carpinterías originales y las elegantes molduras llaman la atención desde el primer momento, dejando claro que nos encontramos en un edificio histórico construido en la primera mitad del siglo XIX. En este espacio, José María y María nos explican que apenas llevan tres años en esta casa.
“Estábamos viviendo en Barcelona, y en verano de 2020, decidimos volver aquí. Influyó la pandemia, los niños… y que Paris/64 estaba creciendo mucho. Fue en ese momento cuando decidimos volver”, explica María.
“De hecho, cuando llegamos a esta casa, la vivienda estaba dividida en dos. Una parte eran las oficinas y el showroom de Paris/64, y la otra parte, en la que vivíamos nosotros, todo separado por una puerta”. Continua José María.
Ahora, la casa es muy vivible, tal y como nos cuenta María: “Es una casa que nos gusta mucho por el ambiente, los techos altos… pero la casa aún no está con la decoración que nos gustaría por el nivel de vida que llevamos por Paris/64, y porque tenemos dos niños. Eso nos obliga a tener una casa muy funcional”, prosigue María.
En el amplio salón comedor conviven piezas de diseño moderno, como un amplio sofá de piel que viene de su antigua casa de Barcelona, con otras piezas de diseño vintage. En un lateral, destaca una preciosa mesa de comedor extensible con unas sillas retro fabricadas con técnica cannage o de rejilla de ratán; un material que está presente en varios rincones de la casa. Bajo la mesa de comedor, hay una alfombra tipo persa “regalo de mi cuñada Mónica; nos ha acompañado por los distintos hogares que hemos tenido”, señala María. Y presidiendo la zona, un gran espejo redondo que da amplitud y que ya estaba cuando el salón era el showroom de la firma. En esta zona también hay otro elemento de esa época: una estantería “en la que exponíamos los bolsos, y en la que ahora tenemos libros, fotografías o piezas destinadas a tomar algo con los amigos”.
LA CASA, ANTIGUA SEDE DE PARIS/64
Junto al salón se encuentra el despacho en el que María y José María trabajan cuando están en casa. En esta estancia se encontraba la oficina principal de Paris/64 en sus orígenes. Hoy, la firma, además de sus dos tiendas en Zaragoza y Madrid, tiene oficinas en ambas capitales, además de un almacén logístico.
Pero aun así, la pareja necesita un espacio para trabajar en casa: “El despacho es la zona creativa, la zona más de pensar, más de estrategia”, explica José María. En esta zona todavía se conserva la mesa de reuniones de la época anterior, acompañada de varias sillas Cesca. En la estancia también destaca un cuadro al que le tienen mucho cariño. El cuadro es de Ana de la Lastra, una artista zaragozana que está casa casada con el actor y productor colombiano Juan Pablo Shuk.
En la zona de trabajo de esta pareja de empresarios zaragozanos han nacido muchos de los proyectos que están impulsando el crecimiento de París/64, una empresa que nació fruto de la vocación y de las ganas de emprender un proyecto común: “Ambos vivíamos en Barcelona, y cada uno tenía sus respectivas carreras profesionales, yo había estudiado Derecho y ADE, aunque siempre he trabajado en departamentos de marketing, y Chema era consultor”. A los dos nos iba bastante bien, pero queríamos empezar un proyecto juntos. Además, los dos tenemos la vena emprendedora de familia, y decidimos que los bolsos podían ser ese proyecto común que buscábamos. Chema siempre me regalaba bolsos por acontecimientos, cumpleaños, Navidad, Reyes… A mí me encantan los bolsos, y en ese momento vimos que podía ser un producto con una salida online fácil, porque no tiene el problema de tallas y devoluciones de las prendas. Bueno, fácil lo veíamos en ese momento, porque luego lo ves con perspectiva, y aunque hemos crecido mucho, es más complicado de lo que parece”, nos cuenta María mientras estamos sentados en la mesa del despacho.
“Hicimos un viaje a Ubrique, una Semana Santa aprovechando las vacaciones de nuestro trabajo. Y allí, nos enamoramos del proceso de fabricación. Empezamos con dos modelos de bolsos, y la primera web vio la luz en 2017. Y en julio de 2019, todo cogió una dimensión más profesionalizada cuando deje mi trabajo”.
Mucho ha llovido desde entonces. Aunque están en pleno proceso de expansión, Paris/64 está teniendo un crecimiento del 200% “Un crecimiento que se está produciendo con mucho esfuerzo detrás, porque lo estamos poniendo todo de nuestra parte”, advierte José María.
De cara al futuro, la firma quiere seguir creciendo en mercados internacionales: “Hace un año exacto, las ventas internacionales eran del 9%, ahora representan el 40%. Y el objetivo es que en dos años, el 80% de las ventas sean internacionales, teniendo en cuenta además que España debe seguir creciendo. Queremos seguir creciendo en mercados donde ya tenemos mucha repercusión, como Japón, Estados, y por supuesto, Europa. También queremos crecer en Corea y en México… Acabamos de abrir nuestro centro logístico, las oficinas de Madrid, las de Zaragoza, las tiendas en estas dos ciudades. Y próximamente, habrá más tiendas. La intención es seguir creciendo tanto en el formato online como en el físico”, señala José María.
Para afrontar ese crecimiento, “este 2023 estamos afrontando una revolución tecnológica, porque la marca está creciendo mucho. Estamos cambiando la web por otra más potente, porque a veces creces tan rápido que los sistemas no te responden”, completa María.
Junto al despacho, en el amplio recibidor que antiguamente también servía de separador entre la zona de showroom y la de vivienda, destacan piezas como una mesita comprada en un anticuario zaragozano, un mueble rehabilitado por María y José María (les encanta rescatar muebles antiguos y actualizarlos con pintura a la tiza, o una estantería en la que exponen los prototipos de algunos de los bolsos de Paris/64.
LA ZONA PRIVADA
Al otro lado del recibidor, comienza la parte privada de la casa. La habitación principal, los dormitorios de los niños, y la cocina. En particular, nos ha llamado la atención la habitación de la hija de María y José María; una estancia decorada con un precioso papel pintado de inspiración floral, una bonita alfombra con forma de casa y una cama de metal de aires retros.
La cocina, con el blanco y el rojo como protagonistas, es el epicentro de la vida familiar; el espacio donde José María y María pasan su tiempo junto a sus hijos, gracias a la amplia mesa que tienen en una de las esquinas.
EL RINCON Y LAS PIEZAS FAVORITAS
Ante la pregunta del rincón en el que pasan más tiempo, tanto José María como María lo tienen claro: la oficina, afirman ambos entre risas. Pero si hablamos del tiempo en familia, también lo tienen claro. Para María, su rincón favorito es frente a la televisión: después de cenar, se sienta frente a ella junto a la peque para ver un capítulo de Mickey. “Es un momento muy especial, es el momento más importante del día para ella”.
En el caso de José María, su zona preferida de la casa es la cocina: “La cocina es el punto de encuentro de la familia. La verdad es que no somos de ver mucha tele, más allá del fútbol o los capítulos de Mickey, así que nos gusta compartir momentos en la cocina”.
Respecto a las piezas más especiales de la casa, los creadores de Paris/64 piensan rápidamente en el cuadro del despacho pintado por Ana de la Lastra, porque aporta un toque de color y de modernidad a una casa de ambiente clásico, y la lámpara del dormitorio, una joya con un diseño de ratán adquirida en Rue Vintage 74.
Ana, Chema, muchísimas gracias por abrirnos las puertas de vuestra casa y permitirnos conocer un poco más al alma de Paris/64.