¿Y ese rollo de que en verano no hay “ferrerorroché” ni huevos kinder porque el calor “podría perjudicar su calidad”? Resulta que chocolate y altas temperaturas son perfectamente compatibles si sigues unas pautas tan básicas como tu cerebro.
Consejo básico 1.- NO guardes el chocolate en la nevera
Llegas a casa en pleno verano cargado con tu compra del Pryca y lo primero que haces es meter el chocolate en la nevera. ¡Epic fail! Aunque sea un gesto instintivo, a nivel de conservación, es un auténtico desastre: la humedad es una de las mayores pesadillas del chocolate, porque hará que su “cualidades organolépticas” varíen. Además, la nevera alberga otros alimentos que pueden afectar negativamente al sabor de nuestro chocolate, que es higroscópico y absorbe todos los olores de su entorno.
La forma ideal de conservar el chocolate es a temperatura ambiente, entre los 14 y 20°C, lejos de los rayos del sol y con una humedad inferior al 60%. En resumen, en un lugar fresco y seco como una despensa o incluso una vinoteca. Si a pesar del consejo sigues guardando el chocolate en la nevera:
A. Eres un alcornoque, te hemos dicho que no
B. Al menos ponlo en los estantes superiores, donde hace un poquito más de fresquito.
C. Sácalo de la nevera 15 minutos antes de consumirlo.
Consejo básico 2.- NO innoves, mantenlo en su envoltorio original
La regla número uno es: ¡mantén el chocolate en su envoltorio original como si fuera su traje de superhéroe! Ese envoltorio está diseñado para mantenerlo a salvo y en plena forma.
Si a pesar de todo eres una persona BOBA y decides liberarlo de su envoltorio…
- Si vas a meterlo en la nevera, envuélvelo en papel de aluminio o papel encerado.
- Si lo vas a dejar fuera de la nevera, el mejor compañero es un envase metálico con tapa.
- También puedes usar una bolsa hermética, esas que parecen de astronauta.
- Otra opción con estilo es un frasco de cristal con tapa.
Consejo básico 3.- Diferencia entre tipos de chocolate
El chocolate blanco es el que más sufre cuando sube la temperatura. Hay que cuidarlo para que no se derrita, absorba olores extraños o pierda su esencia y sabor. Algunos optan por no comprarlo en los meses más calurosos y esperar a que pase el verano. El chocolate negro al tener menos leche en su fórmula, se mantiene fuerte y no se derrite tan fácilmente.
Y si tu chocolate, sea cual sea su tipo, tiene una fina capa blanca, no te preocupes. Esa apariencia se llama afloramiento o blooming. No significa que el chocolate esté estropeado, sino que ha sufrido cambios de temperatura. La manteca de cacao se ha vuelto líquida por el calor y luego se ha cristalizado en la superficie de la tableta debido al frío. Puede no ser estéticamente perfecto, pero no es peligroso para tu organismo.