Aitana Muñoz es periodista, experta en comunicación y formadora. Lalo Cruces, interiorista y artista multidisciplinar. Y ambos viven en una preciosa casa con vistas al Ebro y a la Basílica del Pilar. Normalmente, es esta presentadora quien se asoma a nuestras casas mediante programas de Aragón TV como Objetivo o Aragoneses por el mundo. Pero hoy, somos nosotros los que no metemos hasta la cocina de la casa de esta pareja zaragozana para descubrir dónde viven y saber algo más de su vida.
Son las 20:00, esa hora mágica en la que el sol comienza a ponerse, cuando Aitana y Lalo nos reciben en su casa. A primera vista, las vistas del Pilar y sus espectaculares atardeceres son la joya de la corona de esta vivienda. Pero realmente, la casa está llena de pequeños tesoros que iremos descubriendo durante la visita, en una charla repleta de arte y de retazos de la vida de esta pareja que tiene pasión por la decoración y por las cosas bonitas.
Sentados en el sofá de terciopelo verde, comenzamos a rememorar la historia de esta casa que vivió una reforma nada más salir del confinamiento que nos encerró en casa para intentar atajar la pandemia. “Llevamos aquí dos años, las obras comenzaron en 2020 durante la desescalada, y entramos a vivir en junio de ese año. La verdad es que la obra fue rápida, porque Lalo tenía todo muy claro, y como fue nada más salir del confinamiento, la gente tenía ganas de recuperar sus vidas y había entusiasmo por volver a trabajar”, señala Aitana.
Probablemente muchos de vosotros seguiríais la reforma porque, mientras duraron las obras, Aitana fue colgando el desarrollo de los trabajos en su cuenta de Instagram a través de una serie de stories a las que bautizó como Canal Reformas (unas stories que todavía pueden verse como destacados en la cuenta de la presentadora).
Para Lalo, la reforma fue sencilla: “Derribar algunos tabiques, pintar…Teníamos claro para qué queríamos los espacios, porque previamente le dimos bastantes vueltas a la idea de crear una zona de trabajo, al tema de reutilizar, restaurar…” Aitana apunta que antes de comenzar las obras pensaron mucho en la distribución de los espacios, ya que dudaban entre un gran espacio abierto, o tirar tabiques, pero dejar independiente una zona de trabajo.
Finalmente, y tras la experiencia del confinamiento en su anterior vivienda cuando su casa se llenó de cámaras, cables y ordenadores para grabar el programa de televisión “Héroes”, decidieron que tener una zona de trabajo independiente era clave. “Al final, siempre que se pueda, en un hogar tiene que tener separada la zona de descanso y ocio de la zona de trabajo”, explica la presentadora.
En la zona del trabajo, las líneas rectas, el blanco y el minimalismo son protagonistas. Entre decenas de libros, destaca un mapa del mundo colgado de la pared que ha acompañado a Aitana en las sucesivas mudanzas. En él, Aitana ha ido marcando con colores los viajes que hizo durante su etapa como presentadora de Aragoneses por el Mundo, los viajes que ha hecho sola, y los que ha hecho junto con Lalo. Viendo el mapa, salta a la vista la pasión por los viajes de nuestros anfitriones de hoy. En el despacho también podemos ver algunos guiños a Taiwán, ya que el hermano de la presentadora vive en Taipéi.
Una reforma que combina pasado y modernidad
El corazón de la casa de Lalo y Aitana es el espacio multifuncional conformado por el salón, la zona de comedor y la cocina. Para crearlo, la pareja apostó por tirar tabiques y eliminar el pasillo que antaño articulaba las habitaciones de la casa. Pese a esta obra, la pareja decidió mantener parte del sabor y de la esencia tradicional de la vivienda. Para conseguirlo, mantuvieron los suelos de terrazo (Aitana tenía sus dudas sobre mantenerlo, y ahora es una ferviente defensora de estos suelos). También se han conservado los azulejos retro de la cocina, el suelo del baño, alguna viga que se ha dejado descubierta… y en el lugar que estuvieron los tabiques, se ha apostado por dejar visible el hueco instalando una tira de roble, “en lugar de resolver esta huella con el típico mortero de cemento. Con la madera tiene mucho más rollo”, explica Lalo.
La moldura que recubre el salón fue creada por Lalo exprofeso. Y también destaca el trabajo artesano de las puertas. “Estoy muy contento del resultado de las puertas, antes de la reforma eran las típicas puertas horrorosas sesenteras lisas, de madera oscura… y un carpintero realizó trabajos de palillería y las molduras para darle este aspecto mucho más actual”, prosigue el interiorista.
Nuestra selección de productos para Aitana Muñoz y Lalo Cruces.
El arte y las piezas de diseño, protagonistas
Como no podía ser de otra manera, la casa de un artista está llena de arte. La entrada a la vivienda es toda una declaración de intenciones: el cuadro eléctrico que todos tenemos en casa está tapado por una obra de Lalo que reproduce los diferenciales que oculta. “Tenemos muchas obras, porque los dos somos apasionados del arte, pero hemos seleccionado mucho para tener lo justo y no sobrecargar el espacio”, comenta Aitana.
En una de las paredes del viejo pasillo ahora abierto a la zona de estar, brilla con luz propia el Baco enfermo de Caravaggio, una obra de Lalo de la serie “Containerland” que forma parte de un proyecto artístico que surge de la fascinación del artista por los contenedores marítimos como metáfora de la economía global. Junto a las obras de Lalo, por la casa hay obras de otros artistas, con nombres como Paloma Hernández, o un Chema Madoz de la desaparecida Galería Spectrum que está entre las favoritas de Aitana: “Como todos vivimos obsesionados por el tiempo, esta obra es reveladora, con el cuchillo cortando el tiempo a rodajas”, explica la presentadora mientras admira la obra.
En la zona de estar, destaca un sofisticado sofá verde con una increíble mesa de centro de Thai Natura. La pared que está sobre el sofá estuvo más de un año vacía hasta que Aitana y Lalo encontraron la pieza adecuada: un espejo cóncavo dorado de La Prendería. “Es muy difícil encontrar un espacio cóncavo antiguo como este”, señala Lalo. En la zona de estar también destaca un neón rosa que compraron en Inglaterra y que junto al Baco de Caravaggio, dan el toque de color al espacio. Además, hay que destacar que los beneficios de las ventas de este neón fueron a parar a la lucha contra el cáncer de mama.
La escena se completa con piezas de Ixia o Denzzo, que conviven en perfecta armonía con piezas hechas por el propio Lalo, o por piezas rescatadas que están viviendo una segunda oportunidad. Por ejemplo, entre la zona de estar, la puerta de la terraza y la cocina de baldosas retro hay dos piezas que están entre las preferidas del interiorista: un macetero que era de su abuela, y una pieza antigua de Toldos Lucas que el propio Lalo recuperó para integrarla en la decoración de su casa. En la terraza también tienen piezas que llaman nuestra atención, como un colorido botijo de Harsa Pati, de Mú Restauración, o una de las icónicas cabezas de Vondom.
Un comedor con vistas al Pilar
Aitana y Lalo tenían muy claro que la mesa de comedor debía estar situada junto a la ventana para que los invitados disfrutasen de las vistas del Pilar. La zona de comedor está enmarcada por una viga vista que ayuda a delimitar espacio. Y sobre la mesa, podemos ver una lámpara de mimbre, un material natural que ahora es tendencia absoluta en el mundo de la decoración. Para completar la escena, cuatro sillas de diferentes estilos entre las que destacan una silla cesca rescatada de un piso de Jaca, o una silla recuperada por Lalo en la que Aitana desayuna todas las mañanas con el Pilar como testigo mudo.
“Yo me he criado aquí, para mí las vistas del Pilar, el horizonte con el Moncayo de los días despejados… Estoy muy acostumbrada a este paisaje que me ha acompañado desde niña, pero aun así, hay veces que miras y piensas… disfrutar de la variedad de los colores y matices de estas vistas, y ver cómo van cambiando en cada estación del año, es todo un lujo”.
Las piezas favoritas de Lalo y Aitana
Ante la pregunta que siempre hacemos a nuestros anfitriones sobre cuáles son esas piezas que les acompañarán siempre, Aitana y Lalo parece que lo tienen bastante claro. Para Aitana, hay piezas como el Chema Madoz, el mapa del mundo en el que va marcando sus viajes, o unas fotografías por una cuestión sentimental. También destaca una escultura, “una obra original que me encanta porque la gané en un concurso de una galería de arte de Ibiza. Tenía que hacerme un selfie con podencos ibicencos, y bueno, la gané. Tuvo que traerme la escultura una amiga que estaba en Ibiza”.
Para Lalo, las piezas por las que siente más apego son un lienzo que la pareja tiene sobre la cama de su dormitorio, (una de sus piezas favoritas de la serie Containerland que está colgada en su casa desde el primer día), además de la pieza recuperada de Toldos Lucas, el macetero de su abuela, o las obras de la entrada. Tampoco se olvida del espejo cóncavo de La Prendería, ya que fue amor a primera vista. “Es una casa pequeña, así que las pocas piezas que hay, son indispensables”, reflexiona Lalo.
El estudio de Lalo, una extensión de la casa
Tras conocer esta casa con vistas, es el momento de bajar a la calle para conocer el estudio de Lalo. Situado en el Paseo de la Ribera, el estudio llena de arte y de diseño está vía con vistas al Pilar. De hecho, Aitana cuenta que son muchos los vecinos que entran al local para dar las gracias a Lalo por hacer la calle más bonita.
Aunque Lalo tiene un estudio de pintura en Garrapinillos, el artista e interiorista decidió abrir el estudio debajo de casa cuando el local se quedó vacío. En el estudio destacan obras que ya tenía terminadas, con obras de la serie Containerland como la Joven la Perla, que fue finalista de la Beca Enate de este año. Y También hay piezas de anticuario que ya tenía, como unas sillas de principio del siglo XX. Objetos rescatados con objetos nuevos como la cómoda, varias sillas…
Sin duda, entre los elementos del estudio llama la atención una silla japonesa, “la primera pieza que me compré con 20 años en una feria, o un sofá con muchos años retapizado. Piezas que han vivido conmigo mucho tiempo”.
Pese a su pasión por la pintura y por el arte, lo cierto es que esta actividad la ha tenido bastante parada en los dos últimos años por motivos laborales. De hecho, en las últimas vacaciones en Francia ha retomado de nuevo su pasión artística y ya está trabajando en una nueva serie que pronto verá la luz. “Mis dos últimos años han estado dedicados prácticamente al desarrollo del proyecto integral para Sphere Group”, una empresa líder en la fabricación de bolsas biodegradables y compostables para la que ha realizado el diseño de planta del edificio, el paisajismo, interiorismo integral y la dirección completa de obra civil de la planta que la empresa francesa acaba de inaugurar en Pedrola.
“Tras estos dos años de vorágine gordísima, el verano me ha venido bien para resetear, y reencontrarme con mi espacio a pie de calle. Llevo un año en el local, he estado muy centrado en Sphere, mezclando ese proyecto con trabajos de clientes más pequeños. No tenía tiempo ni de pisar el estudio. Y ahora estoy retomando la pintura, además de proyectos que no había podido coger hasta ahora, tanto a nivel de interiorismo de empresa como interiorismo familiar”, nos cuenta Lalo mientras está sentado junto a Aitana en uno de los sillones de su estudio.
En ese rincón, la presentadora de Objetivo, un programa de reportajes que ha supuesto su vuelta al periodismo de investigación, Aitana también nos cuenta que en estos momentos, además de la parte profesional, está muy centrada en su formación “En estos momentos estoy rescatando a la Aitana estudiante, combinando estudio y los idiomas con el trabajo. Pero siempre, sin perder de vista que estamos en un momento en el que queremos recuperar la vida de antes. Tenemos claro que hay que disfrutar del momento, del placer de volver a viajar…” Un deseo que probablemente, comparten muchos de los lectores de este artículo que nos ha permitido conocer un poco más a esta pareja zaragozana.
Aitana, Lalo, muchas gracias por recibirnos en vuestra casa y por compartir con nosotros este rato de conversación tan agradable con vistas al Pilar.
