Si dice “Pilarica” no es de Zaragoza… pero qué más da. Porque los tópicos tienen un punto kitsch que nos priva, allá van nuestras propuestas para regalar o regalarte estas fiestas del Pilar. Pasen y vean que “pal” Pilar sale lo mejor”.
¿Con qué te quedas?
Cabezudo de La Pilara. Ni Paco Martínez Soria ni Marianico el Corto; ni Héroes del Silencio ni Amaral. Los zaragozanos más ilustres son los cabezudos, encabezados (valga la redundancia) por Doña Pilara.
Galletas Pilaras. El nombre Pilaras viene de la costumbre que hay en los pueblos pequeños de llamar a cada casa por un nombre. La casa en donde se encuentran las instalaciones de la repostería desde 1929 siempre se ha llamado casa PILARA. De ahí el nombre que le dieron a las nuevas galletas.
Puzzle de la Pilara. Ideal para pasar el rato, para grandes y pequeños. Diversión asegurada con este puzzle de la más grande de los cabezudos.
Virgen del Pilar de peluche. Porque no hay carrito de bebé que no pasee con una medida de la virgen y uno de estos peluches. Ah, y está en varios colores.
Virgen del Pilar en oro. Elegante, clásica y atemporal.
Medalla de la Virgen del Pilar. El collar de toda la vida en su versión más moderna.
Talla de la Virgen del Pilar. Ideal para los que quieren tener su propio altar a la Virgen en su casa.
Pendiente perla con la Virgen del Pilar. Los muy devotos quieren llevar a su virgen por todos lados y con estos pendientes los conseguirán hasta en las orejas. Os lo recomendamos como regalo ideal para recién nacidos.
Quemador de incienso con la figura de la Virgen del Pilar. El auténtico regalo kitsch de esta selección de artículos.
Cabezudo del Morico. El origen de este cabezudo es, al parecer, un mozo de cuadra que se trajo desde Cuba un noble zaragozano: el Conde la Viñaza. Esta figura de tez morena se incorporó al grupo de cabezudos a principios del siglo XIX; desde entonces, es uno de los preferidos de los niños.